La iglesia de Viver está dedicada a San Miguel Arcángel. Es una construcción barroca, del siglo XVII. El interior es de nave única, con capillas en los contrafuertes, y el coro aparece elevado a los pies mientras recibe una cubierta de bóvedas de arista. Un zócalo de azulejos viste los muros interiores, mientras que las capillas alojan un ciclo de lienzos barrocos, relacionados con la escuela holandesa, que rememoran escenas de Abraham. Las capillas dedicadas a San Pedro y a la Virgen del Rosario son barrocas, mientras el retablo titular data del siglo XVI.
A los pies de la iglesia, en el lado del evangelio, se alza la torre, de planta cuadrangular, en mampostería, con el cuerpo superior de ladrillo. Tiene planta rectangular, con capillas entre los contrafuertes, con modificaciones posteriores. Se cubre con bóveda de lunetas. La capilla de la Vocación de San Pedro se reformó con planta cuadrada, cubierta por cúpula ciega sobre pechinas, y a la de la Virgen del Rosario se le levantó un arco en la entrada, decorado en un introdás por lacería de yeso, de estilo barroco, aunque con sabor mudéjar.
La primera capilla citada conserva un pequeño retablo de San Roque, además del titular, del siglo XVI. Los restantes son del siglo XVII y XVIII. A los pies, en el lado del Evangelio, se alza la torre del campanario, de planta rectangular con el cuerpo superior de ladrillo. A la derecha, entrando, hay un altar dedicado a San Sebastián. Tiene a sus lados las imágenes de San Joaquín y Santa Ana y en la parte superior al apóstol Santiago. Es una obra de madera, de estilo barroco, del siglo XVIII, del tipo popular. Le sigue una capilla con un tragaluz o bóveda, donde después de la restauración se ha colocado la pila bautismal en artístico recuadro de azulejos. La capilla está dedicada a San Pedro apóstol. El retablo es de mediados del siglo XVII, con lienzos que a juzgar por el colorido pudieran ser de algún artista formado por Juan Galván. El cuadro representa la escena de la entrega de llaves por el Señor a San Pedro. Al lado de San Pedro están los cuadros del Buen Pastor, Jesús atado a la columna, San Juan Bautista y San Lorenzo Mártir. Una Virgen de la Asunción remata el altar. La tercera capilla está dedicada a la Virgen del Rosario. A la Virgen le falta una mano y el rosario, que fueron robados en febrero de 1990. Asimismo robaron un Cristo de la parte superior y un rosetón de la Virgen del Rosario.
El retablo, de madera dorada con columnas salomónicas decoradas con vides, tiene unos relieves en madera policromada que representan los quince misterios del Rosario, en figuras en relieve, y terminaba con una Cruz (que fue robada) y la Virgen y San Juan Evangelista, en relieve. El altar mayor está dedicado al Titular de la Iglesia, el Arcángel San Miguel, cuya estatua preside el retablo. Este retablo es de madera, de tipo popular, con estípites y decorado con florones y temas de espejos. Es de mediados del siglo XVIII. El primer altar entrando a la izquierda está dedicado a San Roque. Le acompañan San Juan Bautista, en relieve, y otra imagen, que fue robada en 1990, de la que sólo queda su hueco, y cinco pinturas: San Sebastián, San Cristóbal, la Virgen, San Bartolomé y un santo Obispo. Todo el altar se halla en un estado muy deteriorado.
El segundo altar es un retablo y está dedicado a la Sagrada Familia, rematado con San Juan Bautista.
El tercer altar quizá sea el de mayor valor artístico. Un gran crucifijo lo preside. Está rodeado de cuatro santos: dos hombres y dos mujeres, todos con hábito y escapulario, cuya identidad no se puede precisar. La madera es algo tosca, de fines del siglo XVII. Las dos columnas descansan sobre Santa Bárbara y un santo desconocido La iglesia en sí es pequeña, bastante menor que el Santuario de Ntra. Sra. del Prado. La construcción ocupa una superficie de 20 metros de largo por 7 de ancho, con un total de 140 metros cuadrados. La sacristía es de 6 metros por 3,90 dando un total de 23 metros cuadrados. Debajo de la sacristía hay un saloncito de idénticas dimensiones. A la parte del evangelio un pequeñito desván. Las dimensiones del coro ya están incluidas en los 140 metros.